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En casi todas las ciudades españolas el barrio antiguo se caracteriza por ser un lugar ideal para recorrer bares, donde se pueden probar algunos vinos de la tierra y los pinchos más típicos. La ciudad vasca de San Sebastián (Donostia en vasco) es la capital de la provincia de Guipúzcoa (Gipuzkoa). Allí, el barrio antiguo es un laberinto de calles estrechas con muchos bares llenos de gente a todas horas. Juan José Recio lleva trabajando ya tres años de camarero en el bar ＂Pokhara" de San Sebastián. Es un bar donde se sirven desayunos, y también van oficinistas y empleados a tomar el café de media mañana; antes de comer hay gente que toma un vino o una caña con un pincho, y para comer el “Pokhara" ofrece un menú del día económico: primer plato（sopa, ensalada, embutidos etc.),segundo plato (carne o pescado), postre, pan y bebida (vino, agua o cerveza) por 10 euros. Después de comer se llena el bar, a partir de las tres, cuando mucha gente se encuentra para tomar café y jugar una partida. Por las tardes van estudiantes, gente que acaba de salir de trabajar, que ha estado de compras... Muchos días cierran después de las 12 de la noche. Cada bar tiene su ambiente y en el "Pokhara" los domingos por la tarde se ve un partido de fútbol o baloncesto. Son las nueve y media de la mañana. Los clientes están desayunando: unos toman un café con leche y unas magdalenas o un croasán, otros toman un café solo muy rápido. Algunos estudiantes también prefieren desayunar en el bar, por ejemplo, Kepa, lzaskun y Teresa. Llevan charlando un rato sobre los planes para el fin de semana. Toman chocolate con churros, porque es uno de los bares donde mejor lo preparan. Muchas veces se sientan en la terraza que está delante del bar. Juanjo aprovecha para hacer una pausa y fumar un cigarrillo. Pepe, su compañero que está detrás de la barra, está escuchando atentamente los resultados del fútbol en la radio para saber si tiene un catorce en la quiniela. Todas las semanas vuelve a probar su suerte. Acaba de entrar una señora y está mirando la lista de precios. No hay mesas libres,pero ella normalmente se queda en la barra charlando con los camareros; Juanjo ya la conoce. Espera tranquilamente con su cigarrillo entre los labios mientras ella sigue leyendo.